Aprendizaje Basado en la Resolución de Problemas: así se enseña pensando en el futuro

La mayoría de los docentes están de acuerdo en que la resolución de problemas se encuentra entre las habilidades más importantes y necesarias para el desarrollo de los estudiantes en su vida futura.

Aunque esta idea es actualmente aceptada y compartida, la realidad es que para muchos profesores el significado de la afirmación anterior puede variar según el modelo de enseñanza que suscriban.

En este artículo vamos a abordar en líneas generales la metodología de Aprendizaje Basado en la Resolución de Problemas (ABP), y veremos cómo se diferencia de los modelos educativos tradicionales.

Además, haremos un breve análisis del papel que desempeñan las secuencias didácticas en esta nueva metodología de enseñanza.

 

¿Qué es el Aprendizaje Basado en la Resolución de Problemas?

El Aprendizaje Basado en la Resolución de Problemas es una metodología utilizada en algunas instituciones educativas que colocan el acento del proceso de aprendizaje en la búsqueda de soluciones a determinadas problemáticas.

La metodología en cuestión se aparta del proceso tradicional de aprendizaje, donde el estudiante es visto como un contenedor en el que docente vierte su sabiduría. Este aprendizaje marcha en otra senda.

Los docentes que apuestan por la Resolución de Problemas como forma de aprendizaje, consideran que los estudiantes aprenden más y mejor cuando se enfocan en resolver situaciones problémicas, diseñadas como secuencias didácticas.

En la mayoría de los casos se pretende que, a través del análisis de los problemas planteados, y gracias a recabar información y reflexionar sobre esta, los escolares puedan alcanzar un aprendizaje significativo vinculado a las soluciones correctas a las que arriban.

Ventajas del Aprendizaje Basado en Problemas

La metodología del Aprendizaje Basado en la Resolución de Problemas supone una serie de ventajas muy importantes, en comparación con los métodos tradicionales de enseñanza.

Las ventajas del Aprendizaje Basado en Problemas se traducen en beneficios tanto para los docentes, como los estudiantes.

A continuación, revisamos las principales ventajas:

El aprendizaje se torna entretenido y motivante: Parte de la eficacia del Aprendizaje Basado en la Resolución de Problemas es que las actividades y secuencias didácticas se diseñan de tal forma que despierte a la curiosidad y sean percibidas como un reto a superar. Esto se logra planteado metas específicas y creando expectativa vinculadas a la satisfacción del problema a solucionar.

Es una metodología muy versátil: Al ser un proceso de enseñanza que se aparta del modelo tradicional, abre la puerta para la experimentación y la integración con diferentes enfoques. En este sentido, es posible ajustar todos los parámetros que sean necesarios para el alcance de los objetivos. Es decir, se pueden ajustar la longitud y complejidad del proyecto, pero también las condiciones en las que deben actuar los estudiantes para encontrar las soluciones correctas; siempre que las modificaciones atiendan a las necesidades de aprendizaje que se están satisfaciendo.

El ABP fomenta la autonomía: La metodología del Aprendizaje Basado en la Resolución de Problemas tienen varias aristas positivas. Una de estas es que se busca el desarrollo de habilidades para aprender independientemente del contexto o problema específicos. O sea, los estudiantes aprenden a aprender. Esto se logra a través de facilitar y estimular a los educandos a que tomen decisiones sobre la base de sus propios análisis de los problemas propuestos. En este sentido, la independencia y responsabilidad con los resultados son valores deseados, y que se estimulan.

Estimula el aprendizaje significativo: Se entiende aprendizaje significativo como el proceso mediante el cual se incorporan nuevos conocimientos a través de la experiencia, y con una fuerte vinculación con todo el sistema de conocimientos previos. En este sentido, la Resolución de Problemas como forma de enseñanza va más allá de la mera incorporación y memorización de conocimientos. Estimula a los estudiantes para que juzguen y decidan sobre la pertinencia de sus propios aprendizajes.

Prepara para el futuro: Al ser una metodología que pretende crear habilidades para detectar y resolver problemas, ejercita a los estudiantes para reproducir sus métodos resolutivos ante situaciones similares en el futuro. Las destrezas que los estudiantes desarrollan no están ancladas a una respuesta específica, a un problema único. Por el contrario, el problema a resolver muchas veces es una excusa para el desarrollo de lo que consideramos verdaderamente importante: la creatividad, el razonamiento lógico, el pensamiento crítico, la capacidad de colaborar con otras personas, entre otras capacidades importantes.

Potencia las competencias digitales: Es usual que las secuencias didácticas diseñadas para el Aprendizaje Basado en Problemas, integren las tecnologías de la comunicación en el proceso educativo. Los estudiantes se valen de las TIC para reunir la información que necesitan en la resolución de los problemas que enfrentan. En este sentido, las habilidades digitales que más se potencian son la búsqueda, análisis y validación de información relevante, y el dominio de la tecnología necesaria para ejecutar estas actividades.

 Comparativa aprendizaje tradicional y basado en problemas

Para comprender mejor la dimensión positiva que aporta la metodología del Aprendizaje Basado en la Resolución de Problemas a la educación, hemos desarrollado esta tabla comparativa donde confrontamos los modelos: el tradicional y el basado en problemas.

¿Qué papel tienen las secuencias didácticas en el Aprendizaje basado en resolución de problemas?

El concepto de secuencia didáctica hace referencia a la consecución de pasos necesarios para realizar una actividad de tipo educativo. El término nos remite a la noción de orden, de camino o trayecto específico. Sin embargo, este orden puede ser flexible siempre que existan diferentes formas válidas para alcanzar los mismos resultados que se desean.

En la enseñanza tradicional se parte de la idea que existe una sola forma de aprender, la que conoce y dicta el docente. En cambio, en el Aprendizaje Basado en la Resolución de Problemas se parte de la idea de que existen múltiples caminos para alcanzar un mismo resultado, o resultados similares igualmente válidos.

Es decir, cuando se realiza un Aprendizaje Basado en Problemas se les plantea a los estudiantes una problemática y unas condiciones para llegar a la solución. Los docentes conocen o intuyen la solución a la que pueden llegar los estudiantes, pero no impone su autoridad, sino que acompaña el proceso que se convierte en una secuencia didáctica flexible.

En el marco del ABP los estudiantes pueden actuar con autonomía, y el docente solo corrige en aquellos casos que el camino tomado los aleje demasiado de la ruta de aprendizaje más adecuada.

En la metodología de Aprendizaje Basado en Problemas las secuencias didácticas se mantienen, pues son herramientas docentes muy importantes. Sin embargo, desestiman cualquier forma de estructuración rígida, basada en la autoridad; y se favorece la construcción del conocimiento entre estudiantes y el profesor.  

Si le parece interesante todo lo que hemos compartido en este artículo sobre el Aprendizaje Basado en la Resolución de Problemas puede aprender accediendo a la formación Secuencias didácticas: el aprendizaje basado en problemas.